Número de visitas

miércoles, 24 de octubre de 2012

Diario de un demente (III)

Cuando nos dejan salir al patio siempre jugamos al fútbol esquizos y bipolares contra psicópatas y suicidas. Yo juego de portero suicida. Hoy perdimos porque Varelita el esquizo marcó en el último minuto un gol de cabeza, a pesar de los 90 puntos de sutura que le dieron por tirarse desde el segundo piso, para emular a Félix Baumgartner, el paracaidista. Yo le pregunté a Varelita si se había sentido libre al tirarse y el me respondió que lo único que sintió fue un dolor de cabeza del copón. Rancaño, el celador, se enfadó conmigo porque el es un forofo del Madrid y a mí sólo me gusta el fútbol como deporte. Le dije que no entendía que se alegrase de que el Madrid le gane a equipos que no tienen ni agua caliente en sus duchas. Hoy no me dieron flan en el comedor por culpa de Rancaño. No entiendo como los medios de comunicación y los expertos que habitan las cátedras de los bares intentan elevar el fútbol a la altura de Dios. Que yo jugué federado y me gustaba, pero abomino del integrismo y la obcecación de la mayoría de sus seguidores. Así me va, que cuando no toca electroshock, toca doble de Tranxilium. Claro que peor le va a Idoia, la bipolar, que cuando no hace un streap-tease subida a una mesa del comedor, se autolesiona tragando cucarachas. Pues sí, amigos, no es fácil en un manicomio escuchar a Miles Davis y escaquarse de los partidos de la tele. El Doctor Lobelle no me deja pronunciar la palabra manicomio, dice que es despectiva, pero a mi me gusta. Incluso conozco a unos artistas de Coruña que se llaman Manicómicos y montan actuaciones y festivales internacionales de payasos ¿Por qué en esta civilización ya no se les llama a las cosas por su nombre? Payaso es una palabra bonita, los payasos del Gran Circo Americano alegraron mi infancia, cuando no había tele ni internet, eran muy importantes: Los Tonetti, Los Moreno, Charlie Rivel, Los Colombaioni (Que trabajaron con Fellini), Zampabollos, Nabucodonosorcito y tantos otros. Pero no, ahora un payaso es "Un clown" a la cama hay que llamarla "Equipo de descanso" y así con todo. Me da la impresión ¿Sabéis amigos? De que esto es más grave de lo que parece...alguien ha decidido que las cosas realmente importantes de la vida tengan unos nombres tan rebuscados que nadie se preocupe por ellas...

No hay comentarios: